SOLEDAD
La soledad... es aquel
ser etéreo que nace con nosotros para abandonarlo con gusto cuando los brazos
de nuestra madre nos acoge y sentimos la tierna calidez de la cual jamás
queremos desprendernos. Nos da miedo y lloramos para alejarla. Poco a poco nos
va acariciando de vez en cuando y vemos que no es tan mala. Va pasando el
tiempo y la muy ladina nos hace que la echemos de menos en ocasiones en medio
del barullo que supone una vida llena de ruidos y rutinas estresantes. Hasta
que llega un día que la necesitamos y se vuelve en una amante que nos regala
sus mejores momentos. Entonces el romance se hace increíblemente apasionado.
Nos ofrece disfrutar de sonidos antes imperceptibles: la lluvia cayendo, un
pájaro cantando en el árbol de al lado de nuestra ventana, rememorar momentos...
También nos hace encontrarnos con nosotros mismos. Y es cuando nuestro diálogo
hace que podamos ver con claridad la realidad de nuestro día a día. Representa
libertad y hasta a veces por culpa de eso confundimos sentimientos. Pero como
todos los amores fugaces, esa amante cuando es repudiada nos ahoga, nos
estrangula, y volvemos a los sentimientos de nuestra infancia. Ya no es ligera,
se vuelve pesada y nos vuelve a traer el miedo a nuestras vidas; porque sabemos
que el camino se realiza a la inversa porque al igual que nacimos nos vamos de
esta vida de su mano.
Más relatos en:
Interesante presentar como una amante a la soledad, que puede volverse opresiva, aun cuando da buenos momentos.
ResponderEliminarInspirado tu texto.
A veces odiada,a veces necesaria
ResponderEliminarA veces, no llega en su justa medida y es cuando nos ahoga.
ResponderEliminarUn abrazo, Maribel
Las dos caras de la moneda Maribel, esa es la vida.
ResponderEliminarUn beso.
Yo no la consideraría como una amante.
ResponderEliminarUn beso.
Las dos caras de la soledad, la que a veces se vive con tristeza y la otra, la que es más deseada en ciertas etapas de la vida y nos ayuda a encontrarnos con nosotros mismos. Un beso.
ResponderEliminar¡Hola! Me gusta la forma de ver la soledad, Sabina lo dice en una canción 'que se llama soledad', precioso el tema. Que la soledad puede ser buena también.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
El ying y el yang de ese estado que a veces es altamente beneficioso y necesario y otras veces destructivo y opresor.
ResponderEliminarHe disfrutado con tu texto.
Un fuerte abrazo.
Buenos días , que manera mas bonita de expresar la Soledad , me ha encantado la forma que has tenido de definirla como " una amante que nos regalo sus mejores momentos", sencillamente precioso.
ResponderEliminarUn abrazo y un buen deseo para este fin de semana lluvioso.
Las dos caras de una misma moneda, la deseada y buscada, la obligada y odiada. Y al final marchamos solos, bueno unos mas solos que otros, besos.
ResponderEliminarTodo, cuando es deseado produce placer y si no se tiene da dolor...sería maravilloso que obtuvieramos en cada momento lo que mejor nos viniera, por desgracia no ocurre así, tampoco con la soledad.
ResponderEliminarUn beso
Es tremendo pensar eso, pero no podemos hacer otra cosa que ir andando hasta encontrarnos con ella.
ResponderEliminarqué perfecto retrato de la soledad, Maribel!
ResponderEliminarsaludos!